domingo, 6 de enero de 2008

¿Esquelas o trabajas?

La muerte, es protagonista en infinidad de historias y corren ríos de tinta a su alrededor.
Pero pocas veces se habla de qué es realmente y qué importancia tiene.

He estado pensando mucho sobre la muerte después de ver unas esquelas en el periódico...
Me temo que no soy el único y que hay mucha gente que le da vueltas a este tema.

Hay veces que la muerte se presenta de sopetón, otras veces simplemente... se acerca, y de una manera u otra perturba el transcurrir de la vida. Y después de tanto pensar y no llegar a nada, creo que lo importante no es pensar qué es la vida o la muerte, sino qué tengo que ver con la una o con la otra.

Después de pensar mucho más, lamento decir que sólo he llegado a lo siguiente (debido a mi escasísimo entendimiento):

Situándonos en una franja cronológica (simplemente por reflexionar sobre esto en una zona concreta de la eternidad...), de diez mil años hacia adelante y diez mil años hacia atrás, partiendo de hoy, la muerte pierde importancia, hasta tal punto que se podría decir... que la muerte no existe.

Formábamos parte de la vida mucho antes de nacer, y cuando morimos tras un proceso químico bastante gordo seguimos formando parte de la vida.

Lo único que ha cambiado durante ese periodo de la vida denominada "humana", es que en algún momento de ésta se produce un fenómeno bastante curioso llamado inteligencia (no en todos los casos...) que como todo proceso... culmina.

Por lo tanto creo que lo importante es ser consciente de que te hallas en estos momentos, en ese proceso, y utilizar esa "inteligencia" y disfrutar de ella.

Esto no es tan fácil como puede parecer a primera vista, ya que al estar inmerso en este periodo de la vida, a veces no somos conscientes de una manera clara de que somos una especie de efervescencia de materia viva sobre la capa de un planeta. En el cual nuestra inteligencia individual aparece y desaparece de una manera tan rápida que comparado con el tiempo de vida de este planeta, no es ni un suspiro. Y muchas veces malgastamos el poco tiempo de duración de nuestra efímera inteligencia.

Me produciría un profundo pesar cobrar consciencia de mi inteligencia cuando ésta se encuentra en una etapa bastante avanzada de su duración y no haberla utilizado durante mi "vida" mas que para cumplir unas cuantas funciones vitales y aprender un par de chistes.

Al pensar sobre esto es como si hubiera dimensionado de una manera distinta mi inteligencia y la veo escandalosamente efímera.

Esto también me produce un profundo pesar, por lo tanto no quiero seguir reflexionando sobre esto.

Concluyo:

Cuando por la mañana abres el periódico por la sección de la muerte, esas esquelas ajenas pero premonitoras, cumplen su función. Dependiendo de nuestra mentalidad pueden servir para inducirnos a un auto examen de aprovechamiento de nuestra inteligencia.Tras mi propio examen solo puedo decir, que tengo un profundo pesar y no quiero seguir escribiendo más ya que aborrezco mi conducta.

PD: Siento que haya concluido mi inteligencia sin haber reflexionado sobre la duración de la muerte. ¡Bah!